¡Ahora ya conoces las reglas del ajedrez! ¡Bien hecho! Acaba de dar un gran paso. Bienvenido a la gran comunidad de ajedrecistas. Pero, ¿qué hacer ahora? Ante el tablero de ajedrez, te sientes un poco perdido, y es normal. ¿Cómo se hace? ¿Por dónde empezar? Pero, ¿cuál es el siguiente paso? Y sí, ¡conocer las reglas no es suficiente! Si quieres progresar rápidamente, tienes que aprender el poder de cada pieza. Has oído bien. Cada pieza tiene sus propios poderes, pero también sus debilidades. ¿Y cómo se aprende el poder de las piezas? Hay que practicar. Tienes que resolver problemas de ajedrez, problemas de ajedrez bien elegidos como los que encontrarás en este libro. Cada día, unos cuantos problemas, y día tras día, semana tras semana, empezarás a percibir las sutilezas de cada pieza. Poco a poco, como la hoja de una espada que se afila, tu sentido táctico se hará más agudo. ¡Ahora puedes hacerlo! ¡Así, podrás dar movimientos decisivos e infligir daños irreparables a tus adversarios! Sin duda, ¡tus oponentes temblarán! ¡Vamos a la aventura! ¡Ahora puedes ir a por el título de campeón escolar!